Al pensar en la casa ideal, la imaginación suele, por defecto, trazar espacios grandes y luminosos repletos de ventanales de gran tamaño. Pero, en ocasiones, la realidad se enfrenta a ciertas dificultades para poder materializar esos sueños. Por fortuna existen trucos que permiten agrandar visualmente cualquier espacio y ganar en comodidad con estancias más abiertas y de aspecto más diáfano.
Muebles grandes, al fondo:
Para evitar el efecto de encogimiento espacial lo más recomendable es trasladar los objetos más voluminosos al fondo de la habitación y evitar colocar nada cerca de la puerta ya que se corre el riesgo de reducir la sensación de amplitud. El equilibrio definitivo se logrará dejando las paredes próximas a los objetos grandes libres de adornos y ornamentos.
Espejos grandes para multiplicar el espacio:
Son grandes aliados para multiplicar la percepción de holgura en una estancia aunque los de pequeño tamaño no logran cumplir esta función. De ahí la importancia de inclinarse siempre por los que abarcan, al menos, un tercio de la parte superior de la pared ya que estos sí que consiguen engañar al ojo y crear profundidad. Se pueden ubicar tanto en la entrada como encima del sillón, próximo a los muebles de mayor volumen, en el baño o rodeados de focos.
Muebles multifunción.
Camas con cajones, sillones que se convierten baúles, mesas extensibles… Los muebles multifunción son muy prácticos para aprovechar los interiores de casas pequeñas. Una idea muy recomendable consiste en colocar una estantería a modo de separación entre una estancia y otra puesto que, al no alcanzar la altura del techo , no restará espacio visual. El efecto es todavía más llamativo cuando se trata de cocinas americanas o lofts.
Menos es más.
La decoración que se basa en el minimalismo es la clave para lograr espacios despejados y con encanto. Por este motivo, es este tipo de estilo el que más se adapta a las necesidades de amplitud visual. Se elimina todo lo innecesario, se concede protagonismo a las paredes y a la luz dando como resultado una sensación de espacio innegable.
Ventanas desnudas.
La claridad es otro de los elementos básicos para desahogar una habitación. Cortinas oscuras o cualquier otra solución opaca de revestimiento de ventanas debería quedar descartada. En su lugar, sistemas más modernos como estores, paneles japoneses y otras alternativas similares,mantienen la intimidad a la vez que admiten una gran entrada de luz. Y así los espacios parecen más grandes.
Blanco y colores claros.
A la hora de elegir un tono para la decoración, es aconsejable optar por los blancos y claros ya que los colores más densos absorben la luz y restan luminosidad. Paredes, suelos, ornamentos y muebles deben atrapar esa entrada lumínica y reflejarla en vez de dejarla escapar o cegarla.
Puertas correderas:
Entre los objetos que más espacio roban están las puertas y tabiques por lo que, si no se pueden realizar obras para liberar la estancia, se pueden cambiar los modelos tradicionales por los sistemas correderos. De gran utilidad en la despensa, cocina y baño, permiten ahorrar metros y aportar un toque y moderno a la casa.
Muebles con ruedas:
De igual forma los muebles con ruedas son capaces de generar una importante sensación de amplitud cuando se reubican en función de las necesidades. Mesas, baúles, soportes de la televisión…etc son susceptibles de ser trasladados incluso fuera de la estancia para obtener espacios diáfanos que permitan la celebración de fiestas y reuniones. Practicidad y estilo en una sola fórmula.
By decoracion2.com Recomendado por BIG MAT ASURMENDI. Imagen: Pexels.